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Conocé a la triatleta de Haedo que recorrió el mundo representando al país en eventos internacionales

El triatlón es uno de los deportes más exigentes del mundo al combinar tres disciplinas: natación, ciclismo y carrera a pie. Romina arrancó con la primera en el Club Brisas de Haedo y luego comenzó su carrera en esta especialidad. Tras casi una década en la selección argentina, en los que logró varias medallas en competencias internacional, ahora apunta alto. Se prepara para competir en un Ironman, la carrera más exigente del mundo.

El deporte llevó a Romina desde nadar en Haedo o correr por la colectora del Acceso Oeste a formar parte de grandes eventos mundiales en diferentes partes del mundo. Esta vecina de Haedo, que también se recibió de veterinaria y es guardavidas, comenzó su carrera deportiva en la pileta del Club Brisas. Ya en su etapa de facultad le llegó una propuesta que le generó dudas por el tiempo que le iba a demanda: ser triatleta. A pesar de la incertidumbre, decidió arriesgarse y lanzarse a la pileta pero también subirse a la bicicleta y correr.

En el momento en que ella estaba dejando la natación por sus estudios universitarios, apareció Nancy Álvarez, triatleta argentina que participó en los Juegos Olímpicos Atenas 2004, y junto con Deborah, entrenadora de Romina, la convencieron de apostar por el triatlón. “Yo no quería porque pensé que no me iba a alcanzar el tiempo para tres disciplinas pero tuve facilidad tanto para el ciclismo como para correr y empecé a competir”, reveló Romina en charla exclusiva con Viví el Oeste.

Corría el año 2007 cuando ella comenzó a participar en eventos y copas nacionales. Tras logar varios éxitos, ingresó en la selección Argentina y el deporte la llevó a competir por el mundo. “Fue casi sin querer que entre al mundo del triatlón. Justo en esos años surgió el ENARD y empezó a haber un plan de trabajo en todas las federaciones y apoyo para los atletas”, detalló sobre sus primeros años.

Su sueño era representar al país en Juegos Olímpicos y, a pesar de no llegar al máximo evento, sí participó de dos Juegos Panamericanos (Guadalajara 2011 y Toronto 2015) y ganó una medalla de bronce en los Juegos Sudamericanos de Santiago 2014 (relevos mixtos) además de varias copas internacionales. Tras casi una década representando al país en eventos de distancia olímpica, se animó y dio el salto. “Disfrute un montón mis años en la selección pero quería cambiar y a probar otras cosas”, agregó Palacio.

Ella destacó que a pesar de ser el mismo deporte, las carreras de triatlón son completamente diferentes a las de Ironman. Las primeras, vinculadas al deporte olímpico, son más cortas. La distancia oficial que se recorre son 1500 metros de natación, 40 kilómetros de ciclismo y 10 kilómetros de carrea a pie. El Ironman, en cambio, es la prueba suprema:  3,8 kilómetros de natación, 180 kilómetros en la bici y la maratón completa de 42 kilómetros.

“Cada vez quieren hacer más corta la distancia olímpica por el tema de la televisión pero a muchos atletas no les gusta porque cambian la esencia del deporte”, cuestionó Palacio.  Además agregó que existe una diferencia fundamental entre ambos: mientras en las pruebas olímpicas sí se puede ir en pelotón en bicicleta, en el Ironman es obligatorio dejar 12 metros de distancia por lo que la estrategia es completamente diferente.

El vínculo con Haedo y la Zona Oeste

“Acá en el Oeste no tenemos la mejor infraestructura para poder entrenar pero hay muchas personas que hacen deporte y te acompañan”, destacó Romina quien se mostró muy contenta con la calidad humana de la gente de la Zona. Ella solía aprovechar la colectora del Acceso Oeste para salir a correr pero ahora utiliza más la zona de la futura reserva natural Isla Verde. “Me gusta mucho la zona de Ciudad Jardín dónde hay más verde y caminos de tierra”.

Romina asistió al Colegio número 2 de Haedo y se formó deportivamente en el Club Brisas. Por eso se muestra contenta de llevar la bandera de su ciudad y del Oeste en general por todo el mundo. Además durante tres meses al año viaja a Estados Unidos, de dónde es su entrenadora, para participar en los grupos de entrenamiento. “No hay muchas ciclistas de elite en la zona y me gustaría que haya más para poder entrenar juntas”

La pandemia y el futuro:

Romina afirmó que la pandemia fue un duro momento para los atletas. Ella iba a competir en un medio Ironman en marzo que se suspendió y su idea era hacer su primer Ironman completo en 2020 pero no se pudo por la situación global. Al principio debió adaptarse para continuar con el entrenamiento de las tres disciplinas. Nadó en una pileta chica atada para no perder la sensibilidad del agua, corrió por su patio y en una cinta además de bajarse una aplicación para competir virtualmente con otros ciclistas durante el aislamiento.

“Fue una felicidad enorme el hecho de volver a salir a correr o meterme en una pileta nuevamente”, detalló Romina. Además agregó que fue lo mismo entrenar en una casa y que durante esos meses se propuso mejorar la parte de ciclismo. Ahora en un ritmo de competencia similar al de principios de año comienza a proyectar los primeros medios Ironman para marzo del 2021 y su primer Ironman completo para cuando la cuarentena lo permita.  “Los obstáculos en la vida me ayudaron a ser más fuerte”. De Haedo al Mundo.



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